9510617916_cab03e8471_z

El gemir del viento fresco
me susurra entre lamentos
que te escapas, que te vas,
que te escaparás de nuevo.

Llamaradas y ceniza
del volcán que hay en mi centro,
que se enciende y erupciona
con el calor de tus besos.

Cuando me pierdo en tu cuerpo
y me embriago con tu olor,
cuando la luna saluda
a través de tu colchón.

Se acerca ya la mañana,
el sol sale perezoso,
nos mira desde el balcón
y nos observa curioso.

Tú te levantas gozoso,
yo me hago la remolona,
qué gran placer despertar
disfrutando de tu aroma.

Unos cafés nos esperan
en la pequeña cocina,
un nuevo día ha llegado,
¿quién sabe qué se avecina?

Salgo por tu puerta verde,
aquí ya nos despedimos,
nos veremos otro día
entre el canto de los grillos.

Imagen: Chechi Peinado